Sobre el debate que está generando el Proyecto de ley sobre Relaves Mineros
La discusión en el parlamento de un proyecto de ley sobre relaves mineros ha acentuado la preocupación de sectores ciudadanos sobre los graves daños y riesgos ambientales generados por estos efluentes de la industria minera.
Es indiscutible que se requiere una legislación muy rigurosa e integral que regule el tratamiento y disposición de estos desechos altamente tóxicos, cuya acumulación representa con mucha frecuencia enormes riesgos y graves daños para las poblaciones, así como para el patrimonio económico y natural de comunas y regiones, especialmente en el norte del país.
Sobran las situaciones catastróficas provocadas por un manejo permisivo y una disposición irresponsable de estos desechos de la industria minera: El daño y contaminación prácticamente irreversible de la bahía de Chañaral por los relaves de Potrerillos y El Salvador y el aluvión de relaves que sepultó a los 200 habitantes de la localidad de El Cobre, en la comuna de La Calera en 1965, bastan para ilustrarnos los daños catastróficos que pueden producirse por la ausencia de normas, así como por la falta de información, prevención y fiscalización seria y eficaz sobre estos desechos.
Por supuesto que las comunidades y la ciudadanía en general tienen el sagrado derecho a conocer toda la información relativa a estos relaves mineros: es decir contenidos tóxicos, cantidades acumuladas, ubicación de ductos, tranques y otras disposiciones; y el riesgo que representan para la salud, la vida y la naturaleza, así como para los bienes materiales y otras actividades productivas. Así lo exige por lo demás la ley de Transparencia vigente en el país. Por eso en este contexto resultan absolutamente inaceptables la omisión, el secretismo y la reserva de información que pretenden institucionalizar algunas autoridades.
Nuestra región de Atacama, región minera profundamente afectada por estos relaves de gran impacto ambiental, debe hacer sentir con fuerza su voz, demandas y propuestas frente al proyecto en discusión. Los 50 millones de toneladas de relaves depositados prácticamente en el área urbana de Copiapó - Ojancos, Callejón El Inca y El Palomar- que impactan el aire, el agua y el suelo de la ciudad, constituyen un ejemplo concreto y una razón más que suficiente para que las autoridades y la ciudadanía comunal y regional acentúen su preocupación por el debate legislativo y enfaticen las normas y soluciones que se requieren.
Nuestra región debe también hoy sensibilizarse y ser solidaria con la huelga de hambre que sostienen 11 pobladores de Caimanes, pueblo de la vecina región de Coquimbo, quienes mediante tan sacrificada acción están demandando la erradicación del Tranque El Mauro de la minera Pelambres, es decir el tranque de relaves más grande de América Latina cuyos lodos tóxicos constituyen una amenaza inminente no sólo para las tierras, los cultivos y la vida de los habitantes del pueblo, sino además un riesgo letal para toda la cuenca del Choapa.
Giuliano López Rojas
Consejero Regional de Atacama
Comisión de Medio Ambiente
PUBLICADO EL 29 DE OCTUBRE DE 2010 EN LA PAGINA 15 DEL DIARIO CHAÑARCILLO.
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